Mostrando entradas con la etiqueta Rey. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Rey. Mostrar todas las entradas

domingo, 26 de julio de 2020

VEGUERIA DOSONA.

VEGUERIA DOSONA. (de Osona)

FOCHS REYALS.

Primo ciutat de Vich: la part qui es del rey. 313.
Perroquia de Vich. 8.
Perroquia de Sent Andreu de Guix. 11.
Perroquia de Sent Julia de Sorba. 2.
Perroquia de Sent Salvador de Vespela del terme de Gurp. 2. (Gurb)

Después de la página 80 del pdf, aparece esto:

BASES DE ESTA PUBLICACIÓN.

Si no lo impiden otras atenciones perentorias del Archivo, saldrá a luz cada mes un cuaderno de 100 a 112 páginas de impresión.
Su precio es de 5 reales vellón pagaderos por adelantado.
Se admiten suscripciones.
En Barcelona: en la portería del mismo Archivo.
En los demás puntos de España: mediante carta franca al Director de esta Colección, acompañando el importe de la suscripción en una libranza sobre correos.
En el extranjero: en todos los consulados españoles.

COLECCIÓN
DE
DOCUMENTOS INÉDITOS DEL ARCHIVO GENERAL
DE LA
CORONA DE ARAGÓN,
PUBLICADA DE REAL ORDEN
POR
SU CRONISTA,
D. PRÓSPERO DE BOFARULL Y MASCARÓ.

Cuaderno 38 (o 58)

BARCELONA.
EN LA IMPRENTA DEL ARCHIVO.
1856.
Continúa en la página 81:

Perroquia de Santa Maria de Folgaroles. 3.
Perroquia de Sent Julia de Bell Puig. 2.
Perroquia de Riu de Peres: P. G. Eymerich. 1.
Lomas des Ferrer de perroquia de Santa Maria de Vilalaons. 1.
Perroquia de Santa Euginia de Berga. 4.
Castell e terme de Tona. 12.
Quadra de Torra Lobreta. 4.
Quadra de Clavelles. 5.
La Guardia prop Les Loçes (nos troba).

FOCHS DESGLEYA E DE CAVALLERS.

Primo de la ciutat de Vich: qui son del vescomte de Castellbo. 134.
Sent Boy: del bisbe de Vich. 21.
Vila de Ripol: qui es del monestir de Ripol. 174. Ripoll.
Castell de la Guardia: del dit monestir. 61.
Ripolles de fora la villa.91.
Vila de Sent Johan Ses Abadesses: del abat de Sent Johan. 58.
Castell de Laers, perroquies de Johan Apaulu, Sent Merti de Aguassa, Sent Merti de So Rocha, Sent Pau de Sesgorilles: del dit abat de Sent Johan Ses Abadesses. 105.
Castell de Duacastella: qui es den G. Sa Sala donzell. 20. (dos castillos, dos castells)
Castell de Basora: den A. G. de Basora. 20.
Castell de Malany, Vall Fogona: de mossen Roger de Monchada. 56.
C. Corull den Malla. 22.
Castell de Repit (Rapit o Ropit, no se ve bien), Castell de Fornils: de mossen Gilabert de Cruiles. 81. (Cruilles)
Perroquia de Saderre: den A. de Sederre. 7.
Castell de Sentelles ab son terme: es den Eymerich de Sentelles. 89.
Loch de Sent Miquel: qui es den Dalmau de Rochabrune donzell. (no hay)
Lo terme de Muntanyola: del abat del Stany. 18.
Perroquia de Sent Merti de Riu de Peres. 16. (Riu de Pedres, río de piedras)
Perroquia de Folgaroles. 20.
Terme e perroquia del Castell de Maya ab II fochs de Quadra Reyal. 27.
Perroquia de Sent P. de Falgas (es de la casa tatxada) del terme de Castell de Bas. 9.
Perroquia de Gurb: desgleya e de cavallers. 30.
Perroquia de Sent Julia de Sorba del terme de Gurb. 8.
Perroquia de Sent Salvador de Vespella: del terme del castell de Gurb. 7.
Terme de Vigilans de la dita perroquia de Sent Salvador: den Francesch de Malla. 5.
Perroquia de Sent Julia de Bel Puig; desgleya e de cavallers. 2.
Castell e terme de Tavertet: de *Roger de Mayla. lt
Castell e perroquia de Muntet: qui es den R. de Brull. 7.
Castell e terme de *Tavertet: qui es den Eymerich Sentelles. 58.
Castell e terme de Terradull: qui es den Vilademany. 71.
Castell e terme de Solterra e casa de la Ruvira: qui es den Gurb donzell. 28.
Castell e terme de Blanchafort ab II fochs de La Quadra de Grats: qui son del abat de Sent Johan Ses Abadesses. 22.
Castell e terme de Torroella; qui es del bisbe de Vich. 20.
Quadra de la pabordria de Palau: del monestir de Ripoll. 11.
Perroquia de Sent Steve de Granullers: desgleya. 13.
Quadra de Sent Fertos de perroquia de Sent Stheve de Granullers. 2.
Quadra de Cuolomers de la dita perroquia. 4.
Perroquia de Sent Julia de Vilamirosa del terme de Gurb. 6.
Perroquia de Santa Euginia de Berga. 7.
Castell e terme de Sent Fores: qui es del bisbe de Vich ab III fochs de Vilambert e ab VI fochs de Sent Johan. 23.
Perroquia de Tavernelles e terme del castell de Savessona aytant com es de jurediccio del senyor Rey com losromanents sien den Bernardi de Cabrera: e aquests son desgleya. 10. (Sa vessona, sa bessona, la gemela.)
Perroquia de Santa Maria de Vilalehons: desgleya. 12.
Castell e terme des Brull: qui es del bisbe de Vich. 40.
Perroquia Vich: desgleya. 16.
Perroquia de Santa Maria de Folgaroles: de sgleya. 20.
Castell de Muntanyola: del abat de Estany. 18.


domingo, 24 de mayo de 2020

N. 19. Offic. 1. Caroli I. n. 3877. Fól. 70 v.

N. 19. 
Offic. 1. Caroli I.
n. 3877. Fól. 70 v.

El Rey.

Mossen Pedroy Rodrigo Celdran nuestros Scrivanos de raciony qualquiere de vos. Nos havemos confirmado segund que con la presente confirmamos al amado nuestro Francisco Carbonell el officio de Archivero de la nuestra ciudad de Barchinona que tenia y exercia por privilegio de conjuncion con su padre Pedro Miguel Carbonell quondamdel Catholico Rey mi Señor y aguelo que en gloria sea. Mandamos vos por ende que lo assenteys en carta de racion de nuestra Casa y libros de vuestro officio por escrivano de mandamientoy de nuestro Real Archivo de Barchinona con quatrosueldos Barchinonenses de quitacion ordinaria encada un dia y con las gracias y privilegios y exercicioy honras y en el grado y lugar que stuvo y lo tenia en vida de la dicha Catholica Maiestad el dicho Pedro Miguel Carbonell quondam su padre conforme a las ordinaciones de la dicha Cancilleria et Casa de Aragon y de vuestro officio dandole la certificacion necessaria faziendole cuenta y librandole los albaranesdendel vintidoseno dia del mes de enero del añomil quinientos y diz e seis que su Catholica Maiestad fallecio en adelante segund lo que por el officio de prothonotario se os certificara conforme a las dichas ordinaciones. Dada en la Ciudad de Çaragoçaa XVI del mes de enero del año Mil DXVIIII.
Yo el Rey.
Soria locumtenens prothonotarii.
Vidit Cancellarius. Vidit Vicecancellarius.

Doc. 20

miércoles, 30 de enero de 2019

Bernardino Gómez Miedes, don Iayme I el conquistador

Extractos del libro de Bernardino Gómez Miedes :


LIBRO OCTAVO

Capítulo primero, de la fama y renombre que el Rey ganó por la conquista de Mallorca, y como fue llamado y prohijado por el Rey de Navarra.

Conquistada al ciudad
y Isla de Mallorca, el nombre y fama del Rey fue tan célebre, y se extendió con tanta gloria y reputación suya, por todas partes: que no solo acrecentó el temor y espanto a los Reyes Moros, pero mereció todo favor y gracia para con los Príncipes Cristianos. Porque demás que amedrentó al Rey de Túnez, uno de los más poderosos de África, para que no osase enviar el socorro prometido al Rey de Mallorca: Y a quien el sumo Pontífice y ciudades de Italia tuvieron en tanto, que invocaron su favor y ayuda (como adelante se dirá) para contra el Emperador Federico: También el Rey don Sancho de Navarra, entendidos sus tan prósperos successos y señaladas hazañas, se le aficionó en tanta manera, que lo prohijó, y aunque con desigualdad suya, quiso también ser de él prohijado. Mas porque tratemos agora de este tan señalado efecto de amor y afición, como se arguye de la adopción, o prohijamiento, que pasó entre estos dos Reyes, junto con los varios successos del: declaremos quien fue este Rey don Sancho de Navarra, juntamente con las causas y razones que tuvo, así para prohijar al Rey de Aragón, como para ser prohijado del, no embargante que el partido del de Aragón fuese muy aventajado al suyo. Fue este Rey don Sancho, el mejor y más esforzado que jamás tuvo Navarra, a quien por su grande constancia en llevar siempre sus empresas adelante, demás de ser muy valiente de su persona, llamaron el fuerte. El cual después que salió victorioso de aquella famosísima, y siempre memorable batalla de Vbeda, en las Navas de Tolosa, cuando hecho un cuerpo con los Reyes de Castilla y Aragón, vencieron a doscientos mil Moros (como en el primero libro se ha dicho) volviendo a Navarra, con el ocio se hizo excesivamente gordo, y también con la dolencia de gota que le sobrevino, que miserablemente le atormentaba, vino a ser tan gafo, y lisiado de pies y de manos, que ya no podía moverse de un lugar, sino estarse tullido siempre en la cama, volviéndose tan difforme, que tenía empacho de ser visto en público. Puesto que dicen otros, que su mal fue una muy grave dolencia de cáncer que se le encendió en una pierna, y que por esto se estuvo siempre retirado en el castillo de Tudela, sin salir del mucho tiempo, y sin dejarse ver sino a muy pocos de sus privados. Haziale a este buen Rey, viejo, enfermo, y sin hijos continua y solapada guerra el Rey de Castilla, pretendiendo tener derecho al reyno de Navarra, y para no mostrarse en ella, solicitaba a don Diego López de Haro señor de Vizcaya (que es la Cantabria marítima) con el cual de mucho antes tenía el Rey de Navarra diferencias, por los pueblos de Alaua y Guipuzcua entre Nauarra y Vizcaya. Y así con esta ocasión el de Castilla le valía con gente y dinero para proseguir la guerra en su nombre contra el de Navarra. Con esto don Diego con la gente Castellana corría el campo a don Sancho, y no había quien le resistiese. De suerte que viéndose don Sancho imposibilitado para defenderse dellos, y que por mucho que se acomodaba en los partidos de paz que les movía, no querían venir a concordia: determinó de avenirse con el Rey de Aragón, y con su favor y ayuda valerse contra ellos. Pues como se hallase en Tudela, ciudad de las principales de Navarra, de muy alegre, llano y hermoso asiento, a la ribera del Ebro río caudalosísimo, en los confines de Aragón y de Castilla, y a vista del gran monte de Moncayo, envió sus embajadores al Rey don Iayme a Zaragoza, donde a la sazón era llegado de la conquista de Mallorca, para hacerle saber, como tenía muy grande voluntad y afición de alcanzar su amistad, y hacer ciertas alianzas y conciertos con él muy a su gusto y provechosos para sus Reynos. Y como por sus manifiestos impedimentos de edad y dolencias, no pudiese ir en persona a verse con él, le rogaba muy de veras quisiese venir a verle en Tudela, pues estaba propinca a Zaragoza. Oído esto por el Rey, y entendida la gran dolencia y impedimentos de don Sancho, pues la distancia no era más de una jornada, determinó de ir a verle, y contentarle: así por conocer a un tan esclarecido y bien nombrado Rey que tan amigo y estimado fue del Rey don Pedro su padre: como por lo bien que a los Reyes está visitarse, y conocerse por las personas: a fin de que viéndose como en espejo los unos a los otros, y lo que son, con lo que representan vengan en mayor conocimiento de si mismos: y consideren que el sujeto de su grandeza y dignidad Real es naturaleza humana, y que en sustancia no son más que los otros hombres, sino que viene de la mano de Dios, alzar los muchos a uno por Rey y sujetarle. Llevó pues consigo el Rey a don Atho de Foces su mayordomo mayor, a don Rodrigo Lizana, don Guillen de Moncada, Pedro Pérez justicia de Aragón, y a don Blasco Maza (no Alagón), del cual sobrenombre está equivocada la historia del Rey, como sea así que don Blasco de Alagón andaba entonces por el reyno de Valencia con Zeyt Abuzeyt en la conquista, como dijimos en el libro cuarto. Llegados pues a Tudela, no pudo ser el Rey, ni en la ciudad, ni fuera de ella, tan decentemente recibido, como a su Real persona se debía, por los impedimentos y dolencias del de Navarra. Antes fue necesario subir al castillo, y entrar dentro del retrete donde el Rey estaba, para en llegando, poderle más presto hablar que ver. Y así por entonces hechos sus cumplimientos de palabras amorosas, se salió a su aposento dentro en palacio, donde fue con todos los suyos muy espléndidamente hospedado. El día siguiente volvió a visitar al Rey don Sancho: el cual se esforzó a enderezarse en la cama, y comenzando su plática dijo al Rey. Que el grande amor y afición que le tenía junto con el deseo de ver su persona, por ser hijo de tan esclarecido padre como lo fue el Rey don Pedro su mayor amigo y compañero que tuvo en la victoria de Vbeda contra los Moros, había sido la principal causa para procurar su venida a Tudela: pero mucho más por acabar de entender del los felices successos que había oído de sus memorables empresas: habiéndose aventajado con ellas en valor y gloria, a todos los Reyes de España: y no menos por la propinquidad y vínculo del parentesco que entre ellos había: pues con ningún otro le tenía más conjunto que con él, excepto don Tibaldo su sobrino hijo de Tibaldo Conde de Champaña, y de doña Blanca su hermana. Al cual por su ingratitud y menosprecio de muchas buenas obras de padre que le había hecho: en fin le había dado ocasión para tratar y acabar con sus vasallos, le privasen de la sucesión del Reyno, y llamasen a él que tanto les convenía para todo beneficio común y defensa del mismo reyno. Por esto hallaba que para debilitarle la sucesión, ninguna otra vía mejor, ni más firme había, que prohijándose el uno al otro, y acogiéndose en el total derecho y sucesión de sus reynos. Pues podría con harto mejor partido ser él llamado a la sucesión de Navarra, que no él a la de Aragón: siendo ya viejo de LXXVIII años, y que no era posible naturalmente vivir más que él siendo mozo que apenas llegaba a los XXIIII (XXIV). Como acabó su plática el de Navarra, el Rey hizo muchas gracias por el buen concepto que de él tenía, y la afición y benevolencia con que lo confirmaba: que no faltaría por él de corresponder con su amor, y con todo el oficio de agradecimiento que le debía. Y en lo que tocaba al negocio de la adopción, que para él era muy nuevo y de mucha consideración, que pensaría sobre ello, comunicándolo con los suyos, y que entendido lo que era, y adonde podía llegar el efectuarse, sin perjuicio de sus reynos y sucesor, él se revolvería y le respondería. Con esto se salió afuera, y se fue a su aposento a tratar y consultar una tan grande novedad con los suyos.




Capítulo II. Como el Rey sabido el parecer y resolución de los de su consejo cerca el prohijamiento, la dio por respuesta al de Nauarra, el qual tuuo por buena, y del concierto que hizieron.
Maravillado quedó el Rey extrañamente de la proposición hecha por el de Nauarra. Y recogido en su aposento mandó llamar a los de su consejo que traía consigo: a los cuales notificó la larga plática que con el Rey de Nauarra había tenido, y lo que muy de veras le había propuesto cerca de la adopción y prohijamiento que habían de hacer el uno al otro, para poder entrar en la sucesión de los reynos. Puesto que el fin y alma de esta proposición le parecía no era otro, que por obligarle a la defensión de Nauarra contra Castellanos. Oyendo esto los del consejo se admiraron muy mucho de tal demanda, y aunque a la verdad parecía cosa muy aventajada para el de Aragón, todavía se altercó mucho, y hubo diversos pareceres sobre ello. Pues aunque al Rey le estaba muy bien, y le convenía el partido, si quiera para mayor confirmación del derecho antiguo que por sus antepasados fue adquirido al Reyno de Nauarra: pero que adoptar el Rey al de Nauarra, no le podía hacer, siendo vivo don Alonso su hijo único, ya jurado Príncipe sucesor por los barones y grandes, y por las villas y ciudades del Reyno, y también por los de Lérida. Porque era cosa monstruosa un viejo de casi 80 años, ser prohijado por un mozo de tan poca edad: y que también era muy fuera de razón y justicia convidar a otro a la sucesión del Reyno, echando fuera al legítimo sucesor del. Pues como se tratase esto entre ellos, y como cosa muy desaforada y contra toda razón, se dejase indeterminada y dudosa: con las mismas razones y dudas fue referida por don Blasco Maza, Foces y Lizana, al Rey de Nauarra. El cual lo representó así a los de su consejo. Pero como su fin era no tanto prohijar al Rey, cuanto valerse de su favor y ayuda contra los Castellanos, y esto importase muy mucho al Reyno: todavía volvió por respuesta a los mesmos, e insistió, en que cumplía se hiciese esta alianza y confederación por vía del prohijamiento: puesto que por él ningún derecho le quedase a la sucesión de Aragón sino muertos el Rey y el Príncipe don Alonso sin hijos. De suerte que leída esta determinación y decreto de los Navarros al Rey, los halló tan útiles, y honrosos para si, y para el Reyno de Aragón tan provechosos, que luego, con la aprobación de los de su consejo, solo que le quedase la sucesión, prometió de ayudar al Rey de Nauarra con todo su poder y estado: y cumplir con diligencia cuantos conciertos y capítulos sobre esto se formasen: y así el uno al otro se adoptaron de la manera que está dicho. Halláronse presentes a este célebre acto los principales señores de título, y Barones, con los síndicos de las ciudades y villas Reales del Reyno de Navarra, y también los señores y de su consejo que tajo (truxo) el Rey de Aragón. Los cuales por ambas partes con juramento afirmaron, que tendrían perpetuamente ellos y sus descendientes, por rato, y grato todo lo allí concertado y decretado. La cual adopción y prohijamiento, aceptados por los dos Reyes, y con la mano y sello de ellos firmados, se concluyó con tanta autoridad y firmeza, que no deben tener en poco los Reyes de Aragón su derecho tan justamente por esta vía adquirido a este Reyno: si quiera para más justificar la antigua y pacífica posesión que del tienen. Porque si se atiende a lo que significa adopción, si se considera que el Rey con todo el reyno de Nauarra, que podían, la hicieron, y con expreso juramento confirmaron el concierto y cumplimiento de ella: si se examinare la causa dello, que fue por valerse del favor y ayuda del Rey que adoptó, para beneficio y defensa del Reyno constituido en tan manifiesta necesidad: si en fin se tiene respeto, a que la cumplió el adoptado, y que lo defendió con su persona, gente, y dinero, muchas veces, y las hubo contra el Rey de Castilla, no embargante que era su propio yerno, como adelante se dirá, no hay otro que inferir de todo esto, sino que con la muerte del Rey don Sancho adoptante, se acabó de confirmar y consolidar la sucesión y derechos del Rey don Iayme el adoptado, y sus sucesores, en el reyno de Navarra. Según se muestra por el mesmo instrumento y auto de adopción, el cual pone Geronymo Zurita en el libro tercero de sus Annales de los Reyes de Aragón. Y que por ser auto tan célebre y solemne le inferiremos aquí palabra por palabra. Si quiera porque se entienda del lenguage que había entonces en el Reyno de Aragón, haber sido poco diferente en los vocablos, del que agora se usa, salvo en la pronunciación y estilo. 

https://ifc.dpz.es/recursos/publicaciones/24/48/ebook2473.pdf


Capítulo III. Contiene el tratado formal del auto de concordia y adopción que los dos Reyes de Aragón y Navarra se hicieron el uno al otro.

Capítulo III. Contiene el tratado formal del auto de concordia y adopción que los dos Reyes de Aragón y Navarra se hicieron el uno al otro.


Conocida cosa sea ad todos los que son, & son por venir, que yo don Iayme por la gracia de Dios Rey de Aragón, desaffillo ad todo ome, & affillo a vos don Sancho Rey de Nauarra de todos mios regnos, & de mias tierras, & de todos mios señoríos que oue ni he ni deuo auer, & de castiellos & de villas & de todos mis señorías. Et si por auentura deuiniesse de mi Rey de Aragó, antes q d vos Rey de Nauarra, vos Rey d Nauarra que herededes todo lo mio, assi como de suso es escrito, sines contradezimiento, ni contraria d hulhome del mundo Et por mayor firmeza de est feyto, & de esta auinença, quiero & mando que todos mios ricos homes, & mios vassallos, & mios pueblos juren a vos señoría Rey de Nauarra, que vos atienda lealmente (lealmét), como escrito es de suso. Et si no lo fiziessen, que fincassen por traydores, & que nos pudiessen saluar en ningún logar. Et yo el Rey de Aragon vos prometo, & vos conuiengo lealmét, que vos faga aentender, & vos atienda luego, assi como de suso es escrito: & si nó lo fiziesse, que fosse traydor por ello. Et si por auétura embargo y auenenguno de part de Roma, o houiere, yo Rey de Aragon so tenudo por conueniença por desferlo ad todo mio poder. Et si nul home dl sieglo vos quisiesse fer mal por est pleyto, ni por est paramiento que yo è vos femos, que yo vos ayude lealment contra todo home del mundo. Adonde mas que nos ayudemos cótra el Rey de Castiella toda via por fe sines engaño. Et yo dó Sancho Rey de Nauarra por la gracia de Dios, por estas palabras, & por estas conueniéças desafillo ad todo home, & afillo a vos don Iayme Rey de Aragon de todo el Regno d Nauarra, & de aquello qui el reyno de Nauarra pertañe: & quiero & mádo que todos mios ricos homes & mios Concellos juren a vos señoría, que vos atiendan esto con Nauarra, & có los castiellos, & con las villas si por auentura deuéiesse antes de mi que de vos. Et si no lo fiziessen que fossen traydores, assi como escrito es de suso. Et ambos ensemble femos paramiéto & conueniençia, que si por auétura yo en mía tierra camiasse ricos homes, o Alcaydes, o otros qualesquiere en mios castiellos, aquellos aqui yo los diere castiellos, o castiello, quiero & mádo que a qll qui los reciba por mi que viéga a vos, & vos faga homenage. Que vos atiéda esto assi como sobre escrito es. Et vos Rey de Aragon, que lo fagades cúplir a mi desta misma guisa, & por estas palabras en vuestra tierra. Et vos Rey de Aragó atendiendo me esto, yo don Sancho de Nauarra por la gracia de Dios, vos pmeto a buena fe que vos atienda esto assi como escrito es é esta carta. Et si no lo fiziesse que fosse traydor por ello, vos Rey de Aragó atédiédome esto assi como sobre escrito es en esta carta. Et sepá todos aqllos qui esta carta verá, que yo dó Iayme por la gracia de Dios Rey de Aragó: Et yo dó Sancho por la gracia de Dios Rey de Nauarra, amigamos entre nos por fe sines engaño & fiziemos homenage el vno al otro d boca & de manos, & juramos sobre quatro Euangelios que assi lo atendamos, Et son testimonios de est feyto, & de est paramiento que fizieró el Rey de Aragon, & el Rey de Nauarra, & del Affillamiento assi como escrito es en estas cartas, don Atho de Foces mayordomo dl Rey de Aragó, & don Rodrigo d Liçana, & don Guillen de Moncada, & don Blasco Maça, & don Pedro Sanz notario & repostero del Rey de Aragon. Et don Pedro Perez justicia de Aragon, & frayre Andreu Abad de Oliua, & Eximeno Oliuer móge, & Pedro Sáches d Variellas, & Pedro Exemenez de Valtierra, & Aznar d Vilana, & dó Martin de Miraglo, & don Guillé justicia de Tudela, & don Arnalt Alcalde de Ságuessa. Facta carta domingo segúdo día de Febrero en la fiesta de santa Maria Cádelera, in Era Millesima ducétissima sexagessima nona en el castillo de Tudela. Que fue año d la natiuidad del Señor M.CCXXXI. puesto que en este instrumento de la adopción, ninguna mención se hace del infante don Alonso, como el Rey lo affirma, por ventura de consentimiento de ambas partes.